Mario Kempes, una de las grandes figuras de Argentina en el Mundial de 1978, habló de todo en Marketing Registrado. El Matador contó cómo es su presente, recordó la Copa del Mundo con la Selección, entre otros temas.
“Estoy en un momento de tranquilidad, disfrutando de la familia hace mucho tiempo, teniendo muchas horas libres y aprovechándolas para hacer algo. Estoy con toda la tranquilidad del mundo y lo que tenga que pasar va a pasar, pero tratando de vivir el momento”, dijo el ex delantero con respecto a su actualidad.
Además, Kempes recordó el proceso previo al Mundial del 78 e indicó: “Yo creo que la elección de Menotti por parte de la AFA quizás permitió en ese momento por sentar las bases de lo que posiblemente fuera esa piedra filosofal para construir un complejo y casi con la idea que el proceso tenía que durar los cuatro años, siempre y cuando los resultados se dieran y que la gente esté contenta. A dos meses del Mundial, se hicieron una serie de partidos en la cancha de Boca y estuvo muy cerca de ser el final del ciclo de Menotti en la Selección. Los dirigentes lo bancaron y el proceso continuó. Cuando se ganó el primer Mundial, es cuando se empezaron a hacer las cosas a nivel federativo por parte de la AFA.”
“A Menotti le gustaba mucho hablar antes de los entrenamientos. Con el frío que hacía en José C. Paz nos sentábamos todos arriba de la pelota y lo escuchábamos. Yo no estuve mucho con César, porque llegué en mayo y el primer partido del Mundial fue el 2 de junio. La obsesión de Menotti era respetar a la pelota. La segunda consigna era demostrar la personalidad que teníamos y por la que Menotti nos llevó a la Selección. Y la tercera era lo que quería de nosotros en la cancha y las cosas que quería para el grupo del equipo. Era un grupo espectacular. En ningún momento hubo una pelea. Si hubo alguna discusión por jugar a truco, pero a nivel de compromiso nunca”, agregó el ex hombre del Valencia de España.
Ante la consulta de si tomaba conciencia de lo que iba a jugar en la previa de la Copa del Mundo, el Matador respondió: “La verdad que no porque yo había vivido un Mundial diferente a lo que iba a vivir en el 78. Fue diferente al del 74. En el 78 no es que llegaba con una gran experiencia. Llegaba con la expectativa que me había dicho Menotti, que no me dio la camiseta titular apenas arrancó el Mundial. Poco a poco se fue conformando el grupo y a medida que fueron pasando los entrenamientos se fue acomodando el grupo. Me recibieron de la mejor manera. Sabíamos que era muy difícil el Mundial.”
Kempes también habló de Lionel Messi y expresó: “Siempre iba a tener esa perlita negra si no conseguía el mundial y ahora ya lo tiene. Siendo argentino no se puede comparar a Messi con Maradona. Si se lo puede comparar con Neymar o Cristiano Ronaldo o Maradona con Pelé. Messi fue totalmente diferente. Tenía otra forma y otra mentalidad. La elección de Messi de venir a Estados Unidos fue por tranquilidad y creo que va a ser favorable para la Selección Argentina y para que pueda jugar las Eliminatorias y si Dios quiere, llegar al Mundial.”
OTROS TEMAS DE LOS QUE HABLO KEMPES:
KEMPES Y SI ES UNA PERSONA TRANQUILA O LA TRANQUILIDAD FUE LLEGANDO CON LA MADUREZ:
“Cuando uno se va haciendo mayor, se va haciendo un poquito más odioso, porque no te aguantas tantas cosas como antes, pero que, de cualquier manera, dependiendo de qué es esa cosa, tenes que tomarla con un poco más de tranquilidad. Pero la edad pasa y a lo mejor esa tranquilidad que se demostraba en otros momentos, ya cada vez es menos.”
KEMPES Y LO QUE VE CUANDO MIRA ATRÁS:
“Mi vida es una historia que comenzó hace muchos años, no pensando nunca en lo que iba a pasar mañana, si disfrutaba el presente y es lo que siempre me ha pasado y siempre por lo que he tratado de luchar. No si mañana hago un gol en algún partido, sino que pensaba en tratar de descansar y tener la mente despejada. Yo me proponía siempre dormir con tranquilidad por las noches y siempre lo pude hacer antes de cada partido. Yo creo que lo que tiene que pasar va a pasar, pero de alguna manera hay que prever que no pase lo peor.”
“Mi viejo fue un poco duro, pero mi vieja me ayudó más. Había mucha amistad entre el entrenador del equipo en el que empecé y mi padre, que mi padre no decía nada, hasta que mi madre le dijo que llevaba dos años sin jugar y le dijo que me ponga. Y me puso esta historia escrita. Mi vieja siempre venía con un poco de alcohol y me hacía masajes.
KEMPES Y SI LE COSTO HACER UNA VIDA ORDENADA:
“No me costó hacer una vida ordenada, porque me gustaba lo que hacía. Yo iba al colegio, luego iba con mis amigos al cine los sábados y a las 12 volvíamos a nuestras casas. Luego el viaje de estudios estando en Córdoba, no lo pude hacer porque justo jugábamos una final para entrar al Nacional del 73.”
KEMPES Y SU MANERA DE SER EN LA CANCHA:
“Yo siempre trate de ser respetuoso primero conmigo. Dormía a la hora que correspondía dormir, mi vieja me cuidaba con la comida y en Córdoba no me fue muy difícil y seguí con la vida que venía teniendo. Yo cuando entraba a la cancha, respetaba al público que era el que pagaba la entrada y después no era de esos jugadores que pensaba en lo que iba a hacer en el partido. Si el día anterior al partido me cuidaba un poco. Hacia una vida muy normal. Estando en Córdoba me iba a dormir a un colegio de la Sagrada Familia, que me llevaba un hermano de esa congregación y a la mañana siguiente me iba para donde estaban los muchachos.”
KEMPES Y SI LE COSTÓ EL CAMBIO CUANDO LLEGÓ AL VALENCIA:
“No me costó el cambio porque yo tuve la gran suerte de estar en Rosario Central, donde teníamos al viejo Griguol y le encantaban los entrenamientos. Ese equipo de Rosario Central era el de los Picapiedras. El que mejor manejaba la pelota era el Negro González, que jugaba en el sector derecho de la defensa. Físicamente nunca tuve problemas. Cuando cruzó el charco, me costó mucho adaptarme al cambio de horario de esas seis horas de diferencia. A la noche parecía un búho y de día estaba cansado. Eso pasó en los primeros días. Luego, me fui acostumbrando. Cuando jugamos el primer partido, por el Trofeo Naranja, fui un desastre. Los tres primeros partidos con el Valencia fui un desastre porque era un fútbol diferente. Aparte, había murmullos de la gente cuando fallaba y en mi debut pateé un penal a las nubes. Luego mejore en la liga y las cosas fueron cambiando.”
KEMPES Y EL LEVANTAR LA COPA ANTE 80 MIL ESPECTADORES Y SI LO REVIVE CADA TANTO:
“En ese momento no toque la Copa del Mundo. Eran tantas las ganas que teníamos de tocar la copa, que no la pude tocar. La agarraron casi todos, menos yo. Lo que a mí me quedaba después de haber terminado el partido, me quedó la tranquilidad.”
KEMPES SOBRE DIEGO ARMANDO MARADONA:
“Lo disfruté porque tuve la posibilidad de estar concentrado con Diego para el 82. Diego era ese pájaro que vive en una jaula de oro, pero cuando lo largabas adentro de una cancha se transformaba, era otra persona. En la vida privada no lo podemos juzgar. Dentro de la cancha Maradona hablaba de todo.”
