Naomi Osaka, la última campeona del US Open de tenis, ya escribe capítulos en la historia importante del deporte. Con 22 años, la jugadora japonesa es una de las protagonistas de esta temporada y sus números, tanto deportivos como extradeportivos dejan a todos con la boca abierta.

La actual número 3 del ranking WTA presentó ganancias por 37.4 millones de dólares en el último año, cifra récord que la ubica entre una de las mujeres deportistas más importantes de la historia.

A su corta edad ya tiene en su vitrina 6 trofeos de jugadora profesional, entre ellos 3 Grand Slams (2 US Open y un Australian Open) y un título de Indian Wells. Los buenos resultados dentro de la cancha la convirtieron en una pieza muy importante para las marcas. Primero fue embajadora de adidas y ahora en la actualidad, es atleta Nike.

En estos momentos, Osaka cuenta con 15 patrocinadores. Algunos de ellos se sumaron teniendo en cuenta los Juegos Olímpicos de Tokio y el peso de su figura en tierras niponas. Ellos son Procter & Gamble, All Nippon Airways y Nissin. Si bien la cita deportiva se trasladó un año, los contratos se mantienen.

Justamente, la asociación con Nike es el contrato más importante que tiene la jugadora. En el último año, la marca de Estados Unidos le pagó más de 10 millones de dólares. Incluso, la marca planea lanzar una línea de ropa urbana con Osaka como principal protagonista antes de fin de año.

En 2020, Osaka terminó con 4 años de Serena Williams como la atleta mujer mejor paga del mundo. Mientras que la tenista japonesa recaudó 37.4 millones de dólares en 2020, Serena había alcanzado los 29 millones en 2019, siendo esta su mayor cifra. Mucho tuvo que ver en esto los contratos con sus sponsors, monto de dinero que suele superar la plata ganada en los torneos. Según la revista Forbes, de los 37 millones obtenidos en 2020 por Osaka, solo el 10% es de premios de torneos.

Además, la tenista japonesa ha aprovechado la atención que los medios y sus fanáticos le prestan para llevar a cabo una serie de actos contra la discriminación racial. En agosto pasado sorprendió a todos queriendo retirarse de un torneo, lo que hizo que los organizadores tomaran su actitud como un ejemplo y decidieran posponer los partidos, luego de que la policía de Estados Unidos matara a un afroestadounidense.

En el último US Open, el cual ganó con mucha autoridad, Osaka lució en cada partido un tapabocas distinto, con los nombres de personas negras asesinadas por la policía, como el caso de George Floyd.

Fuente: Forbes