Lunes 29 de Julio de 2024
El informe oficial señala que se generarán entre 6.700 millones de euros y 11.100 millones de euros gracias a la organización de los Juegos Olímpicos, el impacto turístico y el retorno económico de las construcciones efectuadas. En el escenario intermedio, el impacto económico sería de 8.900 millones de euros en la región de Île de France. No en vano, los Juegos aportarán 0,3 puntos al producto interior bruto (PIB) francés en el tercer trimestre del año y movilizarán 181.000 empleos.
El informe analiza el período que comprende del 2018 al 2034, incluyendo el impacto en las fases de preparación de los Juegos, durante su celebración y durante la próxima década. De hecho, gran parte de este impacto económico- entre un 83% y un 92%- se registrará en los próximos diez años.
Los ingresos obtenidos por la organización generarán entre un 41% y un 48% del retorno económico, mientras que el gasto turístico oscila entre el 21% y el 32% y la inversión en infraestructuras entre el 27% y el 31%, en los diferentes escenarios estudiados. Sólo por entradas se espera percibir 1.243 millones de euros, a lo que se suman 183 millones del negocio de hospitality. El gasto de los turistas durante el evento será de 2.600 millones de euros, según la Oficina de Turismo de París.
El amateurismo sobre el que se construyó el deporte olímpico ha impedido en muchas ocasiones que los Juegos Olímpicos se adapten a los cambios de la industria del deporte. Sin ir más lejos, hasta ahora la Norma 40 de la Carta Olímpica impedía, bajo amenaza de importantes sanciones económicas, que los deportistas muestren o citen a sus sponsors durante la cita olímpica. Pese a que se mantendrán importantes limitaciones a las marcas de los deportistas, esta será la primera edición en la que no se aplicará esta norma y los deportistas podrán compartir mensajes de agradecimiento en sus redes sociales, siempre y cuando no se haga promoción de sus productos.
Más allá de los patrocinadores del COI, el comité organizador sí que puede recabar apoyo local para aumentar sus fuentes de financiación. Entre los principales patrocinadores de ámbito nacional que se han sumado a París 2024 se encuentran Accor, Groupe Bpce, Carrefour, EDF, Lvmh, Orange y Sanofi.
Otra de las centenarias tradiciones que caerán en esta cita olímpica es la que de no bonificar a los atletas por sus resultados. Hasta ahora ninguna federación internacional había ofrecido premios económicos a los deportistas. Sin embargo, la Federación Internacional de Atletismo (World Athletics) pagará en París 2024 a los campeones olímpicos de sus 48 modalidades. Además, el organismo extenderá su compromiso en Los Ángeles 2028 a las tres plazas del podio, mediante un reparto escalonado.
El COI siempre se ha mostrado reacio a repartir premios económicos, aduciendo que la participación en los Juegos Olímpicos es recompensa suficiente para todos los deportistas. El organismo argumenta que ya devuelve el 90% de sus ingresos a los comités olímpicos nacionales y a las federaciones internacionales.
El informe analiza el período que comprende del 2018 al 2034, incluyendo el impacto en las fases de preparación de los Juegos, durante su celebración y durante la próxima década. De hecho, gran parte de este impacto económico- entre un 83% y un 92%- se registrará en los próximos diez años.
Los ingresos obtenidos por la organización generarán entre un 41% y un 48% del retorno económico, mientras que el gasto turístico oscila entre el 21% y el 32% y la inversión en infraestructuras entre el 27% y el 31%, en los diferentes escenarios estudiados. Sólo por entradas se espera percibir 1.243 millones de euros, a lo que se suman 183 millones del negocio de hospitality. El gasto de los turistas durante el evento será de 2.600 millones de euros, según la Oficina de Turismo de París.
El amateurismo sobre el que se construyó el deporte olímpico ha impedido en muchas ocasiones que los Juegos Olímpicos se adapten a los cambios de la industria del deporte. Sin ir más lejos, hasta ahora la Norma 40 de la Carta Olímpica impedía, bajo amenaza de importantes sanciones económicas, que los deportistas muestren o citen a sus sponsors durante la cita olímpica. Pese a que se mantendrán importantes limitaciones a las marcas de los deportistas, esta será la primera edición en la que no se aplicará esta norma y los deportistas podrán compartir mensajes de agradecimiento en sus redes sociales, siempre y cuando no se haga promoción de sus productos.
Más allá de los patrocinadores del COI, el comité organizador sí que puede recabar apoyo local para aumentar sus fuentes de financiación. Entre los principales patrocinadores de ámbito nacional que se han sumado a París 2024 se encuentran Accor, Groupe Bpce, Carrefour, EDF, Lvmh, Orange y Sanofi.
Otra de las centenarias tradiciones que caerán en esta cita olímpica es la que de no bonificar a los atletas por sus resultados. Hasta ahora ninguna federación internacional había ofrecido premios económicos a los deportistas. Sin embargo, la Federación Internacional de Atletismo (World Athletics) pagará en París 2024 a los campeones olímpicos de sus 48 modalidades. Además, el organismo extenderá su compromiso en Los Ángeles 2028 a las tres plazas del podio, mediante un reparto escalonado.
El COI siempre se ha mostrado reacio a repartir premios económicos, aduciendo que la participación en los Juegos Olímpicos es recompensa suficiente para todos los deportistas. El organismo argumenta que ya devuelve el 90% de sus ingresos a los comités olímpicos nacionales y a las federaciones internacionales.