A diferencia de muchos, Final Fantasy VII no fue mi primer encuentro con la saga. No, ese premio se lo lleva el octavo juego de la franquicia, aunque eso no significa que no tenga el mismo amor por la historia de Cloud que los mas de 10 millones de jugadores que lo disfrutaron cuando salió hace mas de 20 años.
Final Fantasy VII es para muchos y con buena razón, el mejor juego de la franquicia, y si bien no vamos a ponernos a discutir dicho planteo en esta breve nota, vamos a decir que es un “si, pero”. La idea de una remake de este juego se viene barajando hace mas de una década, cuando Square-Enix presentó la introducción del mismo, hecha de nuevo para PlayStation 3 utilizando un engine nuevo. Pasarían varios años hasta que el estudio japonés se decidiera ponerle manos a la obra, y el motivo fue claro. Si el equipo original no estaba presente, entonces no se podría hacer.
Final Fantasy VII Remake no solo rehace el juego, sino que trae de regreso a su escritor original Kazushige Nojima, su productor Yoshinori Kitase, su diseñador Tetsuya Nomura y el compositor clásico de la franquicia, Nobuo Uematsu.
El resultado es visible ahora mas que nunca con la demo ya en nuestras manos, una versión mas depurada y moderna de la que estuvo el pasado año en la E3, que sorprende no solo por lo bien que se ve visualmente, sino también por lo estable del desempeño incluso en las PlayStation 4 base.
Recrear el clásico de los JRPGs no es tarea sencilla, y Square-Enix ha tomado esto muy a pecho, y lo que tenemos en este caso pareciera demostrar que ese espíritu innovador que tenían hace dos décadas no ha muerto. Final Fantasy VII Remake hace uso de un interesante e intuitivo sistema de combate, que trae a la saga a la actualidad, sin olvidarse del pasado, algo que notamos con claridad con Final Fantasy XV.
Este nuevo sistema mezcla la acción de Final Fantasy XV con un sistema de turnos, manejado por la clásica barra de ATB que tanto nos torturó en los inicios del género. En este caso, el combate se separa en dos partes, la primera, no depende del ATB e involucra los ataques normales, esquives, bloqueos y una mecánica nueva de cambio de postura donde Cloud por ejemplo pasa a dar golpes mas potentes pero pierde movilidad mientras que Barret puede lanzar una ráfaga de tiros cargados aunque después deberá de recargar el movimiento para volver a usarlo.
Por su parte, movimientos como Braver, magias e ítems usan el ATB creando la noción de que hay turnos en las peleas como en la época dorada. La magia por ejemplo usa MP, dejando de lado el aburrido y limitante sistema empleado en Final Fantasy XV. Los Summons también estarán presentes aunque lamento decir que no están presentes en este momento. En la demo no se puede acceder al sistema de Materia, pero este estar presente en el juego final de la misma forma que lo estaba en el juego clásico, donde había que equiparlas en armas y armaduras.
La acción de las peleas no es algo de darle a los botones sin pensar, como pasaba Final Fantasy XV, sino que implica pensar los encuentros dependiendo del contrincante. Si están lejos habrá que cambiar de personaje a Barret, mientras que con otros hay que aprovechar el contraataque de Cloud o los diferentes elementos de las magias. Muchas mas mecánicas están presentes en el juego dependiendo del enemigo, lo que promete mantener el combate alejado de la monotonía, y tener que usar ATB para utilizar pociones evitará que nos confiemos demasiado y despreocupemos por el daño recibido.
La historia finalmente estará separada en episodios, y por lo que sabemos, este primer capítulo culminará con el escape de Midgard de parte de Cloud y compañía. Square-Enix prometió que cada entrega ampliaría bastante la historia del juego y que cada una sería del largo de un juego normal. Varios de los avances nos han mostrado que nada del contenido original faltará al igual que mostraron un poco del contenido nuevo. El veredicto en este aspecto está todavía por verse, pero por lo menos podemos confiar en que el combate y la música estén a la altura de la tarea.
Final Fantasy VII Remake estará a la venta el 10 de abril en exclusiva para PlayStation 4, otras versiones podrían llegar a futuro.