El PSG no confirmó su salida del Parc des Princes, pero ante la imposibilidad de adquirir su histórico estadio, el conjunto estudia una posible operación. Hay varias opciones barajándose entre el club: Ris-Organgis, en el departamento francés de Essonne, o en Poissy, en Yvelines, donde ya está ubicado el centro de entrenamiento de París Saint-Germain.

Por su parte, la comunidad urbana de Saint-Quentin-en-Yvelines también presentó su candidatura, aunque la promoción ha provocado reaccionas a muchas asociaciones locales. Una quincena de ellas publicó peticiones para retirar la candidatura en Internet, hasta llegar a recoger 10.700 firmas, para exigir abandonar el proyecto. Los manifestantes denuncian la decisión del consejo regional, que votaron poner a disposición un terreno de cincuenta hectáreas en la zona para la construcción del futuro estadio de PSG.


Las asociaciones están preocupadas por “los importante impactos ecológicos, financieros y cívicos” en torno al sitio elegido, que está situado entre el Velódromo Nacional y el estanque de Saint-Quentin, la mayor masa de agua de Île-de-France. Este espacio, clasificado como zona Natura 2000, fue creado por la Unión Europea con el fin de mantener la biodiversidad y proteger en particular las aves que lo frecuentan, donde habitan más de doscientas especies diferentes.

De hecho, París Saint-Germain ya anunció el pasado marzo que tenía entre sus planes la construcción de un nuevo estadio propio después de la entrada de Arctos en su accionariado. El director general de Arctos, Alastair Seaman, en un acto organizado por Financial Times, se refirió a la construcción de un nuevo estadio: “hay muchas posibilidades de que PSG construya un estadio nuevo y moderno en las afueras de la ciudad de París; estamos trabajando en este tema con ellos”.