A pesar de las sanciones y medidas tomadas, en el mundo del fútbol se continúa viendo varios hechos de racismo cada fin de semana. Luego de las situaciones sucedidas el último sábado en Italia e Inglaterra, Gianni Infantino propuso que se apliquen castigos inminentes para los clubes cuyos hinchas hayan cometido algún acto por el estilo en medio de un partido.
En la noche italiana del sábado Milan le ganó por 3-2 al Udinese en la Serie A, pero el resultado quedó marcado por los hechos escandalosos. Sobre los 34 minutos del primer tiempo, Mike Maignan le advirtió al árbitro Fabio Maresca que estaba siendo víctima de cánticos racistas, pero, al no encontrar respuesta por parte del colegiado y de la hinchada, el arquero francés decidió abandonar el campo de juego de Bluenergy Stadium. Caso similar ocurrió el mismo día en la Championship con el mediocampista jamaiquino Kasey Palmer del Coventry.
Tras conocer estas situaciones, el presidente de la FIFA publicó un comunicado, en el cual expresó que los incidentes ocurridos fueron totalmente aborrecibles y completamente inaceptables y le dejó un mensaje de apoyo a las víctimas: “No hay lugar para el racismo ni para ninguna forma de discriminación, ya sea en el fútbol o en la sociedad. Los jugadores afectados cuentan con todo mi apoyo”. Además, Infantino volvió a confirmar que la primera medida a tomar ante estas situaciones es implementar las tres interrupciones y propuso: “Debemos implementar la expulsión automática para el equipo cuyos hinchas hayan cometido actos racistas y provocado el abandono del partido. Además, se deben imponer prohibiciones de acceso a los estadios a nivel mundial y cargos penales para los responsables de actos racistas”.