El Inter de Milán está cerca de cerrar los estados financieros de la temporada 2023-2024 con una disminución de alrededor del 50% de sus pérdidas, entre 40 millones y 45 millones de euros. Inter estaría recortando las pérdidas con las que concluyó la temporada 2022-2023, que llegaron hasta 85 millones de euros, así como los números rojos de 2021-2022, de hasta 140 millones de euros.

El fondo Oaktree tiene previsto una facturación agregada en 2023-2024 de 440 millones de euros, aumentando en quince millones de euros los ingresos del curso anterior. La caída de la facturación deriva de su participación en la Champions League, cayendo en octavos de final, y el recorte en el broadcasting de la Uefa, pero se verán compensados por los derechos de televisión de la Serie A y la venta de jugadores.


En los ingresos correspondientes a los derechos audiovisuales de la Uefa, Inter registrará una caída de más de treinta millones de euros, pasando de 99,5 millones en 2022-2023 a 65 millones en 2023-2024. Sin embargo, los derivados de la Serie A pasarán de 87 millones a cien millones, así como la venta de jugadores, que reportará una inyección de unos setenta millones de euros.

Por otro lado, los ingresos comerciales serán de 77 millones de euros, unos 24 millones más que en 2022-2023. El aumento se debe a la firma de nuevos contratos con Paramount+, Nike y U-Power. De este modo, el conjunto italiano cerrará, de nuevo, con un resultado operativo positivo desde 2017-2018. Este se podría elevar hasta 10 millones de euros, respecto al negativo de 40 millones de euros de la pasada temporada. Las cargas financieras del club, que ascienden a unos 40 millones de euros, son las causantes del resultado neto negativo.