El Inter sigue con su plan de volver a la rentabilidad luego de una década en números negativos y un roto de 245,6 millones de euros solo en 2020-2021. En la temporada 2023/24 redujo en un 58% sus pérdidas, hasta 35 millones de euros. Para esto fue esencial el crecimiento del 22% en la facturación, que llegó a los 473 millones de euros.

El club de Milán explicó en un comunicado que este aumento en la facturación se debe principalmente a los resultados del área deportiva, es decir, al campeonato obtenido en la Serie A. Los logros deportivos supusieron un aumento en la facturación comercial. Los gastos operativos, a su vez, se mantuvieron casi estables, alcanzando 464,5 millones de euros.


En el comunicado el club no detalla sobre más tipos de ingresos o gastos, como movimientos de jugadores, pero sí resalta la importancia del nuevo fondo, el grupo Oaktree. Este fondo tomó el control en mayo luego de los impagos del grupo chino Suning, y recapitalizó 47 millones de euros apenas asumió. La firma incrementó en 44 millones las reservas de capital del Inter y capitalizó los últimos 3 millones de los préstamos de los accionistas. Estas inversiones, apunta el Inter, “demuestran su compromiso de lograr la estabilidad financiera y operativa del club”.

Por último, la entidad ve con optimismo esta temporada en la que, a nivel de negocio, anunció un acuerdo con un nuevo patrocinador principal: Betsson. La casa de apuestas sueca valoraría el frontal de la camiseta interista en 30 millones de euros anuales. Además, este verano también apareció en la manga la plataforma cripto Gate.io y Qatar Airways marcó su presencia como sponsor de la ropa de entrenamiento.