El Milan pone en marcha el proyecto de su nuevo estadio en San Donato. El primer paso es la adecuación de la zona, que se basa en la recuperación y limpieza de las autopistas y calles que te llevan al lugar en el que se levantará el estadio.

Este proceso será breve, ya que llevará tan solo tres semanas. Los trabajos están enfocados en limpiar la zona de posibles residuos, cortar el césped e instalar un sistema de vallado y separación.

Medio año después de que el conjunto rossonero recibiera la luz verde por parte del Ayuntamiento de San Donato a la propuesta de variación urbanística de la zona, se están iniciando los trabajos.


El objetivo de la propuesta que presentó el club al Ayuntamiento de San Donato se basa en una gran mejoría de la zona, ya que se creará una nueva Porta di Milano, una conexión entre San Donato y la Abadía de Chiaravalle, y además, la idea es diseñar un centro infraestructural único en la zona, que incluya ferrocarril, subte y autopistas.

En concreto, Milan proyectó un estadio con capacidad para unas 70.000 personas, unas 5.000 localidades menos de las que tiene San Siro, estadio en el que disputa sus encuentros como local el club rossonero e Inter de Milán. La inversión para el estadio de San Donato será de menos de 1.000 millones de euros e incluirá una importante zona verde con 230.000 metros cuadrados, un museo de 3.000 metros cuadrados, una tienda del Milan, un hotel y un pabellón deportivo con unos 3.000 asientos.


Esta fase de adecuación de la zona es sólo el primer paso antes de que el club pueda cerrar todos los procesos burocráticos y formalizar los acuerdos con partes interesadas que quieran adherirse al proyecto, que se estima que se podría prolongar entre doce y dieciocho meses.