El Barcelona celebró una junta general extraordinaria en la que se votó el acuerdo con Nike. Con 419 votos a favor, 27 en contra y 22 abstinencias, los socios dieron el visto bueno al nuevo contrato. Tras el informe del presidente, el tesorero del Barcelona, ​​Ferran Olivé, explicó cómo es la relación entre el club y Nike.

Olivé subrayó que, en 2021, la junta directiva de Joan Laporta reconoció que el club no estaba sacando el máximo provecho posible del acuerdo con Nike. A partir de ahí, la intención fue renegociar el contrato con la empresa, consiguiendo finalmente lo que el tesorero considera “un acuerdo entre iguales, porque Nike necesita al Barça tanto como el Barça necesita a Nike”. También explicó el nuevo modelo de colaboración entre el club y la marca deportiva, y dijo que “se basa en poner en valor la marca Barça y sus activos de patrocinio a la vez que se acelera el desarrollo del negocio de BLM (Barcelona Licencing and Merchandising)”.


El presidente blaugrana, Joan Laporta, destacó en su intervención que “el acuerdo con Nike demuestra que el Barcelona volvió a la vanguardia mundial” De esta forma, se estima que se duplicará el importe del contrato anterior con una fórmula económica que abarca los catorce años de duración del acuerdo. Se estima que el importe fijo mejorará hasta cien millones de euros por curso, frente a los cuarenta actuales. Este importe sin variables se mantendría hasta 2027-2028, mientras que se elevaría en diez millones al año a partir de ese curso.

El nuevo acuerdo con Nike, BLM y la tan ansiada vuelta al Camp Nou serán las claves para que el club ingrese 890 millones de euros en 2024-2025 y cierre la presente temporada con un resultado neto de unos cinco millones de euros. Este dato contrasta con las pérdidas de más de 90 millones registradas en 2023-2024.