Los sponsors son una parte fundamental de la estabilidad económica de los clubes, sobre todo el main, que ocupa el lugar central de la camiseta. En LaLiga española, el negocio de los patrocinadores es un tema que preocupa a todos los clubes año tras año a causa de contratos a corto plazo. Sin embargo, la campaña entrante pinta bastante esperanzadora para la mayoría de los equipos tanto de la primera como de la segunda división.


El Real Madrid renovó con Fly Emirates, marca que lo acompaña desde el 2013, por otra temporada, Barcelona firmó con Spotify hasta 2025, y Atlético de Madrid se asoció con WhaleFin en un acuerdo válido hasta 2027. Entre los tres capitalizan una gran parte del negocio: de los 220 millones de euros totales que implica la recaudación por sponsors en España, las tres potencian abarcan 176,5 millones (el 80%).

Ocho son las marcas nuevas que arribaron a LaLiga para este año, y varios son los clubes que debieron salir a buscar patrocinador: a los tres ya mencionados, se suman Sevilla (firmó con Degiro), Valencia, Real Sociedad (ambos con Cazoo), Cádiz (Khalifa Capital) y Almería (Khaled Juffali).


A su vez, marcas como BitCi, Socios.com (que participó de la compra del Barca Studios, adquiriendo el 24,5%), la inmobiliaria Urbas o la americana Platzi han dejado de sponsorear clubes españoles, por lo que no se lucirán en ninguna indumentaria.

En la temporada 2021-2022 fueron seis los equipos de Primera que arrancaron sin marca en su camiseta. De hecho, tres de ellos firmaron solo por un año y son los que descendieron: Deportivo Alavés, Levante UD y Granada CF, y actualmente son tres de los seis clubes que aún no han encontrado relevo. En la otra vereda, equipos como el Villarreal, Athletic Club de Bilbao, Getafe y Celta mantienen a sus sponsors hace ya varios años.