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Los impactos económicos de la salida de Messi y Cristiano de España

La comparación de ambos hechos está relacionado con la preparación previa de los clubes.
Jueves 21 de Octubre de 2021
Durante una gran cantidad de años, "El Clásico" de España, protagonizado por Barcelona y Real Madrid, fue uno de los eventos más importantes del deporte mundial, principalmente por la rivalidad entre Cristiano Ronaldo y Leo Messi.

Desde que Kantar Media mide los espectadores del clásico, el partido más visto fue el de la Copa del Rey 2010/11, donde se registró una audiencia total global de alrededor de 650 millones de espectadores, siendo Top 3 eventos deportivos más vistos, junto a la final de la Copa del Mundo de fútbol y los Juegos Olímpicos.

La salida de Cristiano Ronaldo del Madrid en 2018 marcó el fin de una era en el fútbol español, como también de su legado con la “7” del “Merengue”: En aquella temporada 2017/18, las pérdidas tras la salida de CR7 fueron de 60 millones de dólares, principalmente por venta de camisetas. También el club era dueño de un 50% de los derechos de imagen del portugués, valuados en 28 millones de dólares.

Un punto a favor en esta comparación es que su salida del club español concluyó en un venta por 105 millones de euros y teniendo en cuenta la realidad económica de hace 3 o 4 años atrás.

Por el lado de Messi, el astro argentino verdaderamente hizo sufrir económicamente al Barcelona: Su salida inesperada sorprendió a todos y más aún por terminar como jugador libre y firmando gratis con el París Saint Germain. Los números de pérdidas en concreto fueron 77 millones por ingresos comerciales, 43 millones por disminución de merchandising, como la venta de camisetas y 17 millones por venta de entradas y abonos. En resumen, la marca del club blaugrana disminuyó en un 11%, y los beneficios que le otorgó al club español el pase de su mejor jugador de la historia fue nulo.

En definitiva la salida de Cristiano tuvo un impacto más deportivo que económico, en un mercado de pases en el que también se desprendieron de James Rodriguez, en ese entonces su número "10", en cambio para el Barcelona la salida de Messi dejó un agujero muy difícil de cubrir y que se le suma a una gran deuda económica a causa de un mal manejo de gestión por parte de la directiva de la última década.
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