Tras una serie de incidentes que se dieron en el partido entre América de Cali e Independiente Medellín, disputado el 14 de agosto que terminó con 5 personas heridas, la fiscalía de la ciudad de Medellóin determinó restringir el acceso de público hasta el 2024.

El problema vino porque los hinchas del América de Cali quisieron robarle una bandera a los de Independiente, lo que culminó con una batalla campal, que se frenó con la intervención de la policía.

Con el objetivo de que cese la violencia en las tribunas del fútbol colombiano, las autoridades de Medellín establecieron una sanción ejemplificadora. El equipo de Cali no podrá llevar sus hinchas a Medellín hasta el año 2024.