River ya jugó dos finales en Santiago ¿cómo le fue?
La CONMEBOL estrenará por primera vez en la historia del certamen la final única de la Copa Libertadores este próximo sábado 23 de noviembre en un vibrante encuentro que tendrá como protagonistas a River Plate y el Flamengo.
Lo cierto es que, más allá de que antes se definía la Copa con partidos de ida y vuelta con la localía de ambos finalistas, no siempre quedó ahí, puesto que la diferencia de goles y el gol de visitante no eran sistemas de desempate, sino únicamente los puntos hasta avanzados los años de la creación del certamen en 1960.
Tal es así que, paradójicamente River ya definió dos Libertadores en Santiago, tal y como lo tendrá que hacer ahora a fines de noviembre y los recuerdos no son del todo positivos. Ambas derrotas con remontada.
La primera tuvo lugar en 1966, cuando el Peñarol que dirigía Roque Gastón Máspoli y estaba cargado de figuras se impuso por 2 a 0 en el Estadio Centenario, perdió en el Monumental por 3 a 2 y la serie se tuvo que definir en sede neutral con el Estadio Nacional de Chile como opción elegida. Allí, el Manya terminó revirtiendo un 2 a 0 que habían abierto Daniel Onega y Jorge Solari para imponerse 4 a 2 en tiempo extra gracias al doblete de Alberto Spencer y los goles de Abadie y Pedro Rocha para sentenciar la tercera copa para el Carbonero.
La siguiente definición fue ante un equipo brasileño el 30 de julio de 1976 bajo la dirección del árbitro local Alberto Martínez y ante la presencia de 40 mil espectadores, cuando el haber empatado el 2 a 0 inicial del Cruzeiro (Nelinho y Palhinha) de la mano de Oscar “Pinino” Más y Alberto Urquiza no bastó para sentenciar una copa que se definió al minuto 88 gracias al gol de Joaozinho.
Previamente, el conjunto mineiro se había impuesto en el Mineirao por 4 a 1 (Nelinho, Palhinha x2 y Valdo; Óscar Más) y los Millonarios habían hecho lo propio en el Monumental por 2 a 1 (Juan José López y Pedro González; Palhinha).
De aquel equipo del Cruzeiro todavía recuerdan al entrenador Zezé Moreira y a los jugadores: Nelinho, Piazza, Jairzinho, Palhinha y Joaozinho como parte del “mejor Cruzeiro de la historia”, mientras que del lado del equipo argentino ya se destacaban: Fillol, Perfumo, Merlo, Sabella, Leopoldo Luque, Más, Juan José López, Passarella y Alonso bajo la dirección técnica de Ángel Labruna.