El Tanque Sisley, club de fútbol uruguayo, fue excluido de la Segunda División porque acumula deudas económicas tanto con la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), con sus jugadores y con Danubio.
El declive comenzó en 2016 cuando el club firmó un contrato con Danubio por el pase de Joaquín Ardaiz en 1,5 millones de dólares. Por problemas de papeles, el jugador nunca llegó a ser parte del plantel pero Danubio sigue esperando el cobro del dinero.
Sin embargo, a esa suma hay que contar la deuda que tiene el “Verdinergo” con sus jugadores, entrenadores y la propia AUF. Se especula que El Tanque tiene que abonar un aproximado de 2 millones de dólares.
Una realidad preocupante que seguramente ningún dirigente ni hincha del club hubiese imaginado tres años atrás. Estuvo en la máxima categoría de Uruguay en 2017 pero no pudo mantenerse por deudas con sus propios jugadores. Así, automáticamente pasó a la Segunda División 2019.
El problema que arrastra ahora es que en caso de no participar en Cuarta y Quinta B, quería automáticamente desafilado de la Asociación. Ningún equipo puede dejar de participar dos años en competencias profesionales.