A meses de lo que fue la polémica sanción de la CONMEBOL para con dos de los futbolistas de River por doping, Lucas Martínez Quarta y Camilo Mayada se ponen a punto para volver a jugar a partir del 10 de diciembre, fecha en la cual recién quedaría cumplido el plazo establecido.
Fue el 21 de junio del presente año el día en el cual el fallo no se inclinó por las apelaciones del Millonario y complicó así la continuidad de al menos dos de sus jugadores en lo que restaba de la Copa.
Con River hoy eliminado del certamen y ante la falta de actividad de competencia para ambos futbolistas, el más joven de los dos, Martínez Quarta, no pudo contener sus emociones y compartió esta semana un emotivo relato en el cual expresa como se siente a través de su cuenta personal de Instagram.
Entre otras cosas, el zaguero resalta la importancia de estar en actividad y lo difícil que se volvió la situación para él y su compañero en los últimos meses.
Leéla completa a continuación.
"Si supieran que tan sólo necesito volver a tocar una pelota para poder estar completamente feliz, de volver a hacer lo que me gusta. Si supieran que tan sólo necesito volver a salir por ese túnel del Monumental y volver a hacer lo que me gusta, sabiendo que después del partido va a estar mi familia esperándome para abrazarme o consolarme. Esa sensación linda de ganar. Esa sensación rara de perder o empatar, pero sabiendo que a la otra semana hay revancha. Esa sensación de poder jugar un torneo internacional con el club que amo y del cual soy hincha, con esa ilusión, ese sueño de poder levantar la copa. Los findes de concentraciones, el ir a entrenar y sentir que tenés la posibilidad de volver a jugar otro partido. Hoy el fútbol me decepcionó, pero sé que siempre detrás de todo lo malo viene algo bueno. Hoy me toca disfrutar mis días al lado de mi familia, estar al lado de ellos. Entrenarme para volver mejor que nunca, para estar más fuerte que nunca, por ellos, por mis compañeros, por los que me quieren y los que no me dejaron caer. Es difícil llevar esto con 21 años. Jamás imaginé vivir esta situación, pero me preparé para esto, para ser un jugador profesional y así va a ser. Tarde o temprano Dios pone todo en su lugar. ¡GRACIAS A TODOS POR EL APOYO!".
