Ascendido hace tan solo dos temporadas y con uno de los presupuestos más bajos del campeonato ecuatoriano de fútbol, Delfín de Manta es hoy el puntero invicto de la Primera Etapa, como el fiel reflejo de un proceso y una estructura de fondo.

José Delgado, presidente del club, charló con nosotros para contarnos algunos de los puntos más importantes acerca de un modelo de gestión que ya ha sido sondeado en otras partes del mundo.

“El equipo por ahora está muy bien, yo creo que no es para menos sentirse muy contento porque somos el puntero del campeonato y tenemos al equipo invicto, lo que significa cosechar los frutos de un proceso que comenzó ya hace tres años”, inicia relatando José a lo que enseguida añade, “tomé al equipo en el 2014, con una situación institucional complicada, libro de pases cerrado y el riesgo constante del descenso. Años más tarde no solamente ascendimos sino que también terminamos de formar un equipo que pudiese tener una participación internacional”.

Y es que, el presente del club no solamente es remarcable desde lo deportivo sino también desde lo humano, considerando la reciente catástrofe natural que terminó con la vida de varias personas en la ciudad, “tuvimos que salir a jugar fuera de nuestra cancha después del terremoto, fue una época muy complicada que nos hizo más fuertes”, afirmó antes de confesar con cierto orgullo que hoy, “gracias a Dios podemos ser aporte a nuestra ciudad con nuestro ejemplo”.

José se describe a sí mismo como, “un hombre muy creyente que mira el presente como una bendición de Dios, después del desastre que vivimos en una ciudad y una provincia que quedó muy dolida y muy caída, siendo nosotros un ejemplo para volver a salir adelante”, además de explicar que, “somos un club que aspira a seguir por esta senda con altas expectativas desde lo deportivo”.

Con respecto al proceso que ha venido conduciendo al equipo por esta senda, Delgado no duda a la hora de aseverar que, “este año armamos un equipo con el objetivo de terminar dentro de los primeros cuatro puestos del campeonato”, añadiendo algo de su experiencia personal, que hoy está inseparablemente vinculada con la gestión del equipo, “yo soy un empresario de mucho éxito gracias a Dios y he hecho en el equipo una mezcla entre la gestión deportiva y empresarial. Pienso que los clubes deben funcionar con un modelo de empresa. Tomamos un director deportivo, con conocimiento del medio y experiencia al momento de armar el plantel. Creo que terminamos decidiendo bien”.

Tras ser consultado más personalmente, el economista afirma que, “no existe una clave para el éxito, es un cúmulo de factores. Sí considero que el haber manejado el equipo con un modelo de gestión de empresa privada además de optimizar los costos y recursos, son factores que hacen rendir el presupuesto para que el equipo esté siempre al día en sus pagos y lo refleje dentro de los resultados deportivos”, a lo que enseguida se mete en su testimonio personal, confesando, “yo fui una persona que nací en el campo y hasta los 18 años trabajé lavando platos en un restaurante. Siempre soñé con ser un empresario, algo que me lo propuse y hoy gracias a Dios lo alcancé, espero que estos ejemplos terminen de convencer a la gente”.

En función al futuro, Delfín espera dejar atrás varias décadas en donde el club osciló entre la Primera y Segunda categoría, re definiéndolo como “un equipo protagonista de todos los años y será un equipo de competencias internacionales permanente”, en donde “al tener un campeonato muy generoso con respecto a la distribución de cupos para Copas internacionales, apuntamos a ser un club recurrente en el certamen continental”.

José tampoco se olvida de como inició todo, develándonos que, “hoy en día nos ha costado tres años el ordenar la casa, pero asimismo hemos visto como el patrimonio ha crecido exponencialmente, antes no teníamos ni un solo jugador con un contrato por más de dos años y hoy a excepción de uno todos tienen opciones de compra”.

A lo que más adelante conceptualiza, “cuando uno arma un modelo de gestión, existen tres pilares fundamentales en donde los derechos de televisión ocupan un papel preponderante, seguido por los patrocinadores y en menor medida los ingresos por venta de entradas o merchandising del club. Soy un agradecido con la empresa privada. Nuestros sponsors permiten que el club hoy esté donde está y podamos cumplir con nuestros objetivos mensuales”.

Entre otros temas abordados, Delgado asegura también que, “el respaldo de la gente es vital, nos fortalece para continuar con este proceso”, y que “este año vamos a ahorrar más, gracias al rendimiento del cuerpo técnico y jugadores”.

Por último, el presidente opinó acerca del presente del seleccionado argentino y una de las frases que bien podría sintetizar esta interesante charla, “tuvimos una etapa muy triste en cuanto a la participación de la Selección, esperamos clasificar a Rusia 2018”; “No busco ni espacio político ni dinero, sueño con Delfín viajando para representar al país con las personas que siempre nos apoyaron. Esperamos que el próximo año lo podamos cumplir.”