Pat Mahoma no para de dejar marca, y tiene la posibilidad de seguir haciéndolo en la nueva final de la AFC que disputará su equipo, Kansas City Chiefs contra Baltimore Ravens. Si llegan a ganar, tendrán un pie directo en el Super Bowl LVIII para defender el título obtenido en 2023.

Todos esperaban que siguiera el historial de su padre como estrella de béisbol, aún así terminó siendo figura clave como quarterback afroamericano, con dos títulos de NFL en su palmarés y en la mira del tercero.

La estrella de la Major League Baseball le dijo, en su momento, al pequeño Patrick Mahomes: “Patrick, no juegues en la NFL. La plata y la historia están en el baseball". Luego confesó que se alegra de que el niño no lo haya escuchado, a pesar de que se debatía entre el fútbol americano y baseball y estaba lejos de ganar su tercer Super Bowl.


Lo que se esperaba de Pat Mahomes era que sea una estrella de béisbol ya que lo tenía todo para hacerlo. No solo su padre llegó a ser una estrella del deporte, sino que de niño, Patrick se destacó en torneos junior de béisbol y hasta fue directamente seleccionado desde la secundaria por los Detroit Tigers en el Draft de 2014. Igualmente, decidió dar un paso al costado y seguir su pasión por el fútbol americano en el deporte universitario de la mano de Texas Tech.

Es un verdadero atleta, un quarterback que correrá lo necesario si la jugada lo necesita, que arriesga mucho por momentos y que sabe la gran fortaleza de su brazo derecho. Algo que lo convirtió en jugador clave en 2017 cuando lanzó excelentes bombas de casi 80 yardas en su Pro Day.

Mahomes es el segundo quarterback afroamericano y el más joven de la historia en ganar el MVP del Super Bowl.