Katie Sowers será la primera mujer que disputará la final del Super Bowl en la historia de la NFL, cuando se enfrente con San Francisco 49ers ante Kansas City Chiefs el próximo 2 de febrero en Miami, Florida.
En el mundo de hoy no parece algo raro porque la mujer fue tomando un rol diferente en cada aspecto de la vida. De apoco, fueron rompiendo barreras y esta vez el fútbol americano es el centro de atención. Por primera vez en las 54 finales de la NFL, una mujer será una pata importante del evento más esperado de la disciplina.
Sowers, nacida en Hesston (Kansas) hace 33 años, ocupará su puesto de coach asistente del entrenador de San Francisco 49ers, Michael "Kyle" Shanahan. Cumplirá su función como instructora de la parte ofensiva, más que nada apuntada a los receptores del equipo. Llegó a San Francisco 49ers en 2016 y anteriormente había trabajado con Kyle Shanahan en los Falcons, aunque solo estuvo como interna.
Su relación con el fútbol americano comenzó mucho tiempo atrás. Empezó a practicar el deporte a los ocho años y se transformó en jugadora profesional una vez que fichó para West Michigan Mayhem, para disputar el torneo Wommen's Football Alliance. Luego pasó a jugar en Kansas City Titans, donde alcanzó su máximo rendimiento, lo que le permitió llegar a la Selección de Estados Unidos. Precisamente allí obtuvo dos de sus mayores logros deportivos tras conquistar el título del Mundial Femenino y la medalla de oro en 2013.
La mujer que había estado más cerca de un Super Bowl había sido la jueza Sarah Thomas, siendo la primera oficial de tiempo completo para la NFL y luego la primera en dirigir un juego de postemporada en la Ronda Divisional de 2019, cuando estuvo en el choque entre los New England Patriots y Los Ángeles Chargers.