Jueves 18 de Agosto de 2016
A sus 54 años, Santiago Lange cumplió su máximo sueño deportivo. Junto a Cecilia Carranza ganaron la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016 en la categoría Nacra 17.
Así, este luchador que ya se había subido al podio en Atenas 2004 y Pekín 2008 con Camau Espínola, emocionó a todos con su logro.
“Fue impresionante haberlo podido compartir con mis hijos. Hay demasiados cosas lindas que me tocaron vivir. Es todo increíble”, comentó emocionado Lange en Milenium Sports, sobre la presencia de sus hijos Yago y Klaus, también participantes en Río.
“Siempre soñé con escuchar el himno y ver la bandera argentina en el poste más alto. Con Camau se nos escapó en Atenas y no sé porque eso siempre tuvo un símbolo muy fuerte para mí. Tenía la experiencia de otros podios olímpicos, pero esto fue tocar el cielo con las manos”, agregó.
Sobre la medal race, dijo: “Fue una regata increíble. Empezarla con una penalización fue muy difícil. Por suerte conocíamos esa cancha de regata como la palma de nuestras manos, por todas las veces que entrenamos ahí. Vi que el viento estaba inestable y supe que teníamos chances. Ceci navegó mucho mejor que en los entrenamientos y eso demuestra lo gran deportista que es”.
“No paro de contestar mensajes. Estoy haciendo un gran esfuerzo por tratar de contestarles a todos. Es un privilegio que la gente haya disfrutado con lo que hicimos”, concluyó.
Así, este luchador que ya se había subido al podio en Atenas 2004 y Pekín 2008 con Camau Espínola, emocionó a todos con su logro.
“Fue impresionante haberlo podido compartir con mis hijos. Hay demasiados cosas lindas que me tocaron vivir. Es todo increíble”, comentó emocionado Lange en Milenium Sports, sobre la presencia de sus hijos Yago y Klaus, también participantes en Río.
“Siempre soñé con escuchar el himno y ver la bandera argentina en el poste más alto. Con Camau se nos escapó en Atenas y no sé porque eso siempre tuvo un símbolo muy fuerte para mí. Tenía la experiencia de otros podios olímpicos, pero esto fue tocar el cielo con las manos”, agregó.
Sobre la medal race, dijo: “Fue una regata increíble. Empezarla con una penalización fue muy difícil. Por suerte conocíamos esa cancha de regata como la palma de nuestras manos, por todas las veces que entrenamos ahí. Vi que el viento estaba inestable y supe que teníamos chances. Ceci navegó mucho mejor que en los entrenamientos y eso demuestra lo gran deportista que es”.
“No paro de contestar mensajes. Estoy haciendo un gran esfuerzo por tratar de contestarles a todos. Es un privilegio que la gente haya disfrutado con lo que hicimos”, concluyó.