Lunes 28 de Julio de 2014
Como voz autorizada del básquet nacional, Sergio Hernández dialogó en Milenium Sports con Maxi Palma y dio su opinión acerca del triste presente de este deporte, con un grave conflicto interno en la CABB y una enorme deuda económica.
Sergio Hernández fue el entrenador de la Generación Dorada del básquetbol argentino desde 2005 hasta 2010. Al frente del equipo que venía de ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, obtuvo el 4º puesto en el Campeonato Mundial de 2006 y la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. Actualmente, es entrenador del Uniceu/BRB de Brasilia.
“El deporte argentino nos tiene acostumbrados a que lo deportivo crece pero la política deportiva no es la ideal. El básquet tuvo un crecimiento meteórico e indudablemente no creció en la misma medida a nivel institucional” comenzó diciendo el entrenador bahiense.
En relación a las declaraciones de Emanuel Ginóbili y Luis Scola, referentes de esta Selección que se prepara para el Mundial de España 2014, expresó: “Manu y Luifa son considerados como dos de los mejores jugadores de básquet en la historia. Nada de lo que dicen les sale de las entrañas, está procesado con nivel académico. Son tipos estudiosos, preparados, que han conocido otras realidades y diferentes niveles”. “Esto pasa porque los que están adentro de la cancha son profesionales. Tienen dietas, trabajos físicos, técnicos, tácticos, a los mejores entrenadores del mundo. Nada los sorprende porque se preparan toda su vida para esto” agregó.
“La medalla de oro trajo daños colaterales. Yo entré a la Selección cuatro meses después de Atenas 2004 y por eso puedo hablar de estos daños. Los que sí estaban preparados eran los jugadores y el entrenador” manifestó luego el entrenador.
En otra referencia a los dirigentes, Hernández dijo: “Los que tienen que hacer que los logros nos potencien no están a la altura. Muchas veces no por ser deshonestos, sino por falta de idoneidad. Esto se debería profesionalizar, estar en manos de personas expertas. Desde el marketing hasta el manejo del dinero”.
“A lo mejor se puede aprovechar la crisis para crecer. Yo espero que sea así. Si no hubiésemos tenido la medalla de oro, no sé si estos jugadores hubiesen tenido la fuerza necesaria para generar este cambio” añadió.
Por último, concluyó: “No hablé con los jugadores porque no es momento. Con varios he hablado en otros momentos porque esto no es nuevo. Se llegó a este punto porque los jugadores hace mucho que piden que les expliquen por qué había problemas”.
Sergio Hernández fue el entrenador de la Generación Dorada del básquetbol argentino desde 2005 hasta 2010. Al frente del equipo que venía de ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, obtuvo el 4º puesto en el Campeonato Mundial de 2006 y la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. Actualmente, es entrenador del Uniceu/BRB de Brasilia.
“El deporte argentino nos tiene acostumbrados a que lo deportivo crece pero la política deportiva no es la ideal. El básquet tuvo un crecimiento meteórico e indudablemente no creció en la misma medida a nivel institucional” comenzó diciendo el entrenador bahiense.
En relación a las declaraciones de Emanuel Ginóbili y Luis Scola, referentes de esta Selección que se prepara para el Mundial de España 2014, expresó: “Manu y Luifa son considerados como dos de los mejores jugadores de básquet en la historia. Nada de lo que dicen les sale de las entrañas, está procesado con nivel académico. Son tipos estudiosos, preparados, que han conocido otras realidades y diferentes niveles”. “Esto pasa porque los que están adentro de la cancha son profesionales. Tienen dietas, trabajos físicos, técnicos, tácticos, a los mejores entrenadores del mundo. Nada los sorprende porque se preparan toda su vida para esto” agregó.
“La medalla de oro trajo daños colaterales. Yo entré a la Selección cuatro meses después de Atenas 2004 y por eso puedo hablar de estos daños. Los que sí estaban preparados eran los jugadores y el entrenador” manifestó luego el entrenador.
En otra referencia a los dirigentes, Hernández dijo: “Los que tienen que hacer que los logros nos potencien no están a la altura. Muchas veces no por ser deshonestos, sino por falta de idoneidad. Esto se debería profesionalizar, estar en manos de personas expertas. Desde el marketing hasta el manejo del dinero”.
“A lo mejor se puede aprovechar la crisis para crecer. Yo espero que sea así. Si no hubiésemos tenido la medalla de oro, no sé si estos jugadores hubiesen tenido la fuerza necesaria para generar este cambio” añadió.
Por último, concluyó: “No hablé con los jugadores porque no es momento. Con varios he hablado en otros momentos porque esto no es nuevo. Se llegó a este punto porque los jugadores hace mucho que piden que les expliquen por qué había problemas”.