Viernes 10 de Octubre de 2014
Guido Mazzoni es uno de los dueños de Bigg CrossFit, el box con más sedes de la región y uno de los más grandes del mundo. Bigg, este 2014, logró algo impensado: clasificar a los CrossFit Games en California, Estados Unidos.
No sólo en Argentina el CrossFit actualmente atraviesa su mayor auge, con cientos de personas practicándolo. Sin embargo, algunas polémicas sobre su entrenamiento lo pusieron en el centro de las críticas.
Actualmente, Bigg tiene cuatro Boxes: en Recoleta, Palermo, Belgrano y otro en Herrera, Paraguay. Entre otros, con el apoyo de Gatorade, ENA y Reebok.
Guido Mazzoni, en una charla con Milenium Sports 106.7, habló de lo importante de practicar esta disciplina a consciencia y, por supuesto, de la experiencia en Estados Unidos junto a los deportistas más importantes del mundo.
Guido, para empezar, ¿qué podes contarnos del CrossFit?
El CrossFit nace hace diez años más o menos. En sí, es un método de entrenamiento normal pero de una forma más divertida. Está mal llamado “Entrenamiento militar”, así fue como se introdujo en Estados Unidos para hacerlo más vendible.
El CrossFit busca entrenamientos de movimientos funcionales, de cosas que hacemos todos los días. La intensidad varía según cada persona. Por ejemplo, un hombre va a levantar más peso que una mujer.
¿Cómo les surgió la idea de tener su propio Box?
Nosotros entrenábamos en Tuluka, que ellos fueron los pioneros en Argentina, y nos encantó. Nos pareció increíble y nos capacitamos para tener nuestro propio Box. En el primer mes, tuvimos 1500 socios en la sede de Recoleta. Si bien el CrossFit es inclusivo, buscamos acercarnos a las mujeres y a las personas mayores para hacerlo aún más.
¿Se imaginaban este crecimiento?
A nivel mundial, somos uno de los boxes que más sedes tiene. El crecimiento fue muy rápido. Cada miembro del equipo de Bigg se ocupa de un aspecto importante y logramos armar un grupo de amigos muy grande.
¿Qué significó participar de los CrossFit Games?
Nosotros clasificamos para los regionales en Chile y allí logramos por primera vez que un equipo americano de habla hispana clasificara a los CrossFit Games. Allí participamos de la mayor competencia de la disciplina junto a los mejores del mundo y tuvimos una buena performance. Es muy difícil que se vuelva a dar algo así, se logró algo increíble.
En el último tiempo, el CrossFit tuvo algunas críticas por su método de entrenamiento. ¿Qué pensas de esto?
Respecto a eso, lo que puedo decir que lo que lastima no es el CrossFit sino los malos entrenadores. Eso sucede cuando no se está capacitado. Puede pasar cuando se exceden en los pesos, por ejemplo. El CrossFit es muy inclusivo y hay gente que jamás hizo deporte y comienza con este deporte.
Por último, ¿qué necesita una persona para comenzar a practicar CrossFit?
Se necesita de un apto médico para venir y hacer la clase de prueba, como en cualquier gimnasio. Después, ganas y la ropa adecuada. Por supuesto que también hay que tomárselo con calma, hacerle caso a los entrenadores y elegir un lugar adecuado. Un buen detalle es que el box tenga la palabra “CrossFit” que es lo que indica que está afilado.
No sólo en Argentina el CrossFit actualmente atraviesa su mayor auge, con cientos de personas practicándolo. Sin embargo, algunas polémicas sobre su entrenamiento lo pusieron en el centro de las críticas.
Actualmente, Bigg tiene cuatro Boxes: en Recoleta, Palermo, Belgrano y otro en Herrera, Paraguay. Entre otros, con el apoyo de Gatorade, ENA y Reebok.
Guido Mazzoni, en una charla con Milenium Sports 106.7, habló de lo importante de practicar esta disciplina a consciencia y, por supuesto, de la experiencia en Estados Unidos junto a los deportistas más importantes del mundo.
Guido, para empezar, ¿qué podes contarnos del CrossFit?
El CrossFit nace hace diez años más o menos. En sí, es un método de entrenamiento normal pero de una forma más divertida. Está mal llamado “Entrenamiento militar”, así fue como se introdujo en Estados Unidos para hacerlo más vendible.
El CrossFit busca entrenamientos de movimientos funcionales, de cosas que hacemos todos los días. La intensidad varía según cada persona. Por ejemplo, un hombre va a levantar más peso que una mujer.
¿Cómo les surgió la idea de tener su propio Box?
Nosotros entrenábamos en Tuluka, que ellos fueron los pioneros en Argentina, y nos encantó. Nos pareció increíble y nos capacitamos para tener nuestro propio Box. En el primer mes, tuvimos 1500 socios en la sede de Recoleta. Si bien el CrossFit es inclusivo, buscamos acercarnos a las mujeres y a las personas mayores para hacerlo aún más.
¿Se imaginaban este crecimiento?
A nivel mundial, somos uno de los boxes que más sedes tiene. El crecimiento fue muy rápido. Cada miembro del equipo de Bigg se ocupa de un aspecto importante y logramos armar un grupo de amigos muy grande.
¿Qué significó participar de los CrossFit Games?
Nosotros clasificamos para los regionales en Chile y allí logramos por primera vez que un equipo americano de habla hispana clasificara a los CrossFit Games. Allí participamos de la mayor competencia de la disciplina junto a los mejores del mundo y tuvimos una buena performance. Es muy difícil que se vuelva a dar algo así, se logró algo increíble.
En el último tiempo, el CrossFit tuvo algunas críticas por su método de entrenamiento. ¿Qué pensas de esto?
Respecto a eso, lo que puedo decir que lo que lastima no es el CrossFit sino los malos entrenadores. Eso sucede cuando no se está capacitado. Puede pasar cuando se exceden en los pesos, por ejemplo. El CrossFit es muy inclusivo y hay gente que jamás hizo deporte y comienza con este deporte.
Por último, ¿qué necesita una persona para comenzar a practicar CrossFit?
Se necesita de un apto médico para venir y hacer la clase de prueba, como en cualquier gimnasio. Después, ganas y la ropa adecuada. Por supuesto que también hay que tomárselo con calma, hacerle caso a los entrenadores y elegir un lugar adecuado. Un buen detalle es que el box tenga la palabra “CrossFit” que es lo que indica que está afilado.
