Luego del último triunfo de Lewis Hamilton en el Gran Premio de los Estados Unidos, Mercedes se volvió a coronar como campeón mundial de constructores en la máxima categoría del automovilismo y el repaso por la historia de cada equipo hizo eco en todos los medios.
A diferencia de otros deportes tales como el rugby o el fútbol, los apelativos de origen geográfico o de identidad no son el motivo predominante a la hora de nombrar una escudería. Y es que, cinco de las diez que participan de la Fórmula 1 llevan aún el apellido de sus creadores tal y como es el caso de: Enzo Ferrari, Bruce McLaren, Frank Williams, Peter Sauber y Gene Haas.
Del otro lado, son los otros cinco equipos los que han modificado su nombre luego de una transición histórica entre marcas adoptadas en sus naming rights y otros distintivos provenientes de la misma industria automotriz.
Tal es el caso por ejemplo de Red Bull ex Stewart Grand Prix, bajo el patrocinio de Ford o de Toro Rosso, fiel traducción de Mateschitz, escuadra que manejaba Giancarlo Minardi en Faenza años atrás.
Asimismo, es el caso de Renault uno de los más particulares entendiendo que por encima de llevar el apellido de su fundador francés, sus administradores actuales no son más del mismo grupo que gestionó a la marca entre 1977 y 1985.
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Fuente: La Nación