En el día de ayer se hizo público el nuevo acuerdo de patrocinio de Roger Federer con la marca japonesa de indumentaria Uniqlo, dejando de lado a Nike luego de más de 24 años de relación. Tras arreglar un monto de 300 millones de dólares por diez años, el suizo lució en su primer partido de Wimbledon la nueva indumentaria.

Luego de hacer pública la decisión que tomó el ocho veces campeón de este torneo de Grand Slam de cambiar de sponsor técnico, esto provocó un movimiento no solo en redes sociales sino también en los mercados internacionales. Una vez que se supo que Roger ya no usaría Nike, la marca norteamericana, la noticia provocó una baja en las acciones de la empresa, que perdieron un 3% de su valor.

Tras haber alcanzado un pico de US$79,13 por cada acción de la empresa, al hacerse pública la noticia pasaron a cotizar casi US$77. Si bien el suizo continuará usando zapatillas de la marca de Oregon, toda la vestimenta será confeccionada por la marca japonesa, que planea también pronto poder usar las siglas RF que caracterizan a la indumentaria que usa el jugador y que por motivos contractuales todavía pertenecen a Nike.

La relación entre Federer y Nike finalizó el primer día de marzo cuando su contrato expiró y no hubo renovación. El nuevo acuerdo entre el tenista que ha ganado 20 Grand Slam y Uniqlo fue firmado el primero de abril, pero se mantuvo en secreto hasta ahora. En la gira previa a Wimbledon, el tenista continuó utilizando la ropa de la pipa.

Según datos de la prestigiosa revista Forbes, Roger Federer tuvo ingresos estimados por US$77,2 millones durante el 2018, siendo el séptimo deportista con mayores ganancias. Ganó US$12,2 millones por premios deportivos y US$65 millones por sus auspiciantes.

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