Días atrás se designó a EEUU, México y Canadá como sede tripartita del Mundial 2026. Sin duda estamos presentes ante una designación inédita donde se eligen por primera vez tres sedes e inédita también su votación. Hasta la designación de Qatar 2022 (La cual se realizó el mismo día que la elección de Rusia 2018) las sedes se votaban a través de la comisión directiva de la FIFA. Hoy se podría decir que es un poco más democrática ya que votaron representantes de todas las asociaciones. Fue así que la candidatura denominada “United” obtuvo 134 votos contra 65 votos de Marruecos.

¿Cómo fue la votación?

Antes que nada, los países candidatos fueron excluidos ya que sería un voto intencionado. De la misma manera fueron excluidos Guam, las US Virgin Islands y Puerto Rico por ser territorios semiautónomos pertenecientes a EEUU. Curioso fue que si permitieron votar a Samoa Occidental (Territorio Americano).

Por otro lado, no se les permitió votar a Ghana por ser excluida temporariamente su asociación a la FIFA, así como Cuba, por considerar que su votación no sería futbolísticamente imparcial por tendencias políticas (Aplauso para los cubanos). España y Eslovenia se abstuvieron voluntariamente de votar.

Dicho esto, el resto de las participaciones si votaron positivamente. La CONCACAF (29 votos) y Oceanía (11 votos) optaron en forma unánime a los países norteamericanos, al mismo tiempo que obtuvieron 9 votos de Sudamérica, 41 de Europa, 33 de Asia y 10 de África.

¿Cómo influye esta votación en la candidatura de Argentina-Uruguay-Paraguay?

Se sabe que Argentina-Uruguay-Paraguay plantearon sus intenciones de candidatura para el 2030 con la intención de celebrarlo conjuntamente con motivo del centenario del primer mundial de 1930 llevado a cabo en Uruguay. El país a vencer para esta votación es Inglaterra, también candidato firme, con la infraestructura preparada y ubicada en Europa, el epicentro económico del Fútbol.

Para nuestra candidatura es beneficioso que ya exista un antecedente de una sede tripartita. Pero por otro lado recordemos que serían tres mundiales, es decir 12 años, sin que se compita en Europa, el continente más fuerte económicamente en este deporte. Como tal, ya existió un antecedente en los Juegos Olímpicos, en el que Atenas fue candidato en 1996 para celebrar el centenario de la competencia (En 1896 se había celebrado por primera vez en Atenas) pero la influencia de Coca-Cola en el COI hizo torcer la balanza para Atlanta (Sede de Coca-Cola).

Se debe tener en cuenta también la reciprocidad de los votos. Sudamérica votó en forma casi unánime por la sede ganadora (Con excepción de Brasil que votaron por Marruecos pensando que el voto era secreto). Esto implicaría la reciprocidad de los 30 votos de la CONCACAF para el 2030, pero del mismo modo Europa le cedió 41 votos de sus 55 participantes, los cuales le fueron mucho más útiles que los pocos sudamericanos. El candidato rival en el 2030 a vencer es Inglaterra. Habrá que ver a quien le retribuye la CONCACAF los votos.

Nuevo Fixture

Se proyecta adelantar el formato de 48 equipos para el mundial de Qatar 2022, pero encuentran inconvenientes con la cantidad de sedes que Qatar puede ofrecer (Qatar es muy pequeño con sólo una ciudad: Doha y su conglomerado).

Los formatos de los fixtures son muchas veces “diseñados” de cierta forma como para que antes del sorteo ya existan determinadas ventajas para algunos, y por supuesto siempre ventajas para el negocio del futbol. Esto ha ocurrido y seguramente de manera invisible para la mayoría de nosotros. Veamos algunos casos.

El primer mundial que me tocó vivir fue justamente en 1978, el primero y único disputado en Argentina y el primero y único (hasta ese momento) ganado por Argentina. No vamos a hablar en este caso de la sospechada goleada a Perú. Simplemente nos limitaremos a hechos comprobables.

El formato de ese torneo fue idéntico al mundial de Alemania 74 con 16 equipos distribuidos en 4 grupos y clasificaban los dos primeros a la segunda fase de dos grupos de también 4 equipos cada uno. El ganador de cada grupo de esta última fase iba a la final y el segundo al partido del tercer puesto. Si nos ponemos a analizar en detalle el desarrollo de Argentina 78, vemos que los cabezas de serie jugaban siempre en la misma sede, y los restantes en otra sede definida. En los fixtures ocurre que todos los países entran en el sorteo de sus grupos con excepción del anfitrión que elige el suyo. Argentina, cabeza de serie del Grupo I tuvo como sede el Estadio de River en todos sus partidos. El primero de ese grupo jugaría todos sus partidos en River en el Grupo A de la segunda fase (En este caso fué Italia), y si saldría segundo (Como ocurrió), todos los partidos en Rosario (Ambas fueron las sedes más cercanas a José C Paz, donde concentraba la selección, con excepción de Vélez que se descartó, junto a Mar del Plata, para la segunda fase). Los demás equipos tuvieron que andar circulando en diferentes sedes y horarios (Mendoza y Córdoba).

Otro aspecto que tienen en cuenta los diseños de los fixtures son los horarios. Se arman para que pueden televisarse a la tarde/noche en Europa. Por eso mismo los partidos de Argentina 78 fueron disputados de mañana y tarde, salvo los de Argentina, que se disputaron a la noche (Inclusive el de Perú que debía disputarse a la tarde junto al de Brasil-Polonia para evitar especulaciones, pero algo “raro” pasó y Argentina entró a la cancha ese día sabiendo el resultado que debía obtener).

Fue así entonces que todos los partidos en Argentina 78, EEUU 94, México 86 y Brasil 2014 fueron disputados de día teniendo que en casos de México y Brasil tener que soportar partidos con calores agobiantes.

Los formatos de México 86 e Italia 90 fueron de una organización inigualable. Seis grupos de 4 equipos, donde el cabeza de serie jugaba siempre en la misma sede, y los partidos restantes del grupo en una sede cercana. Fue el caso de Argentina en Italia 90 que tenía su sede asignada en Nápoles (Por la parcialidad del público por Maradona) y al clasificar como tercero tuvo que deambular por calurosas tardes en Torino y Florencia hasta llegar a la semifinal mientras que Camerún seguía jugando por la noche en Nápoles, donde le correspondía a Argentina. Justamente por terminar como tercero tuvo que encontrarse con Italia en semifinal. Fue un suceso no planificado ni esperado por los italianos al armar el fixture.

El mundial de EEUU 94 tuvo el mismo formato en el fixture que México 86 e Italia 90 con la excepción que se usaron solo 9 sedes. Y también el fixture tuvo otra particularidad. Ocurrió que el 21 de junio de 1994, por motivos de televisación, Alemania y España jugaron su segundo partido antes que Nigeria y Bulgaria jugaran el primero. Es decir, arrancó la segunda fecha antes que termine la primera. Y con la “sospechosa” particularidad que así salió en el sorteo. Así como que en el sorteo el partido de Italia e Irlanda se jugara en Nueva York, donde las dos principales colectividades son justamente la italiana e irlandesa. ¿Cosas del azar?

A partir de Francia 98 hasta la actualidad, el formato fue siempre el mismo. Ocho grupos de cuatro equipos, clasificando los dos primeros a los octavos de final.

Pero resulta que en Corea/Japón 2002 hubo una pequeña manipulación del fixture. Resulta que con este formato los clasificados de cada grupo deben ir a las llaves opuestas y recién deberían encontrarse, de darse el caso, en la final. De esta manera se asegura la posibilidad de que cualquiera pueda enfrentarse a cualquiera. Si no fuera así, tendríamos dos semi-mundiales por separado y el ganador de cada mitad iría a la final, situación que no asegura que los dos mejores sean los finalistas. Además de haber sido un mundial sospechado por los goles anulados a España e Italia ante Corea, este mundial tuvo una manipulación para que Corea juegue siempre en Corea y Japón siempre en Japón, por eso ocurrió que los clasificados de un mismo grupo iban a parar a la misma llave. Justamente se dio el caso que Turquía jugó con Brasil en la mism grupo y volvieron a enfrentarse en semifinales. Efectivamente fue un mundial dividido en dos, y el ganador de cada mitad (Alemania y Brasil) jugaron la final.

Sin embargo las modificaciones tendencionas siguieron. En Brasil 2014 por ejemplo, por cuestiones de acomodamiento de fechas, existió un día que tuvieron que disputarse cuatro partidos, comenzando el último a las 22 horas de Brasil. Por esas cuestiones del azar según el sorteo, lo disputaron Costa de Marfil y Japón. Ningún derroche para la televisación.

Este tipo de manipulaciones se dan también en otros torneos. ¿Por qué en la Copa América siempre se invitan países extra Conmebol a participar? La respuesta es por el armado del fixture. Los países de Conmebol son diez y se hace muy difícil separarlos en grupos y armar llaves eliminatorias.

Y sin ir muy lejos, en la Copa América de 2007 disputada bajo la Venezuela de Chávez, nos encontramos que en la última fecha del grupo jugaron Venezuela y Uruguay, ambos clasificaron y sin embargo volvieron a disputar el partido siguiente por cuartos de final. Un hecho absurdo nunca ocurrido en los torneos continentales con éste formato desde Ecuador 93 hasta Chile 2015. Eso ocurrió, se sospecha, para que el anfitrión Chavista no se cruce con Argentina y Brasil sino hasta la final. Con la desdicha que Brasil clasificó como segundo y se hubieran tenido que cruzar en semis de haberle ganado a Uruguay (Pero eso no ocurrió).

En el 2026 serán 48 equipos divididos en 16 grupos. Esperemos que el fixture y el torneo sean limpios. Que los partidos se disputen por verdadero azar y que gane el mejor, por el bien del deporte y la competencia.

*Artículo escrito por Fernando Alonso