Mientras el seleccionado mayor de China se midió ante India por la Fecha FIFA esta semana, una imagen de sus seleccionados juveniles dio la vuelta al mundo al observarlos vestidos con uniformes militar y el pelo bien corto mirando el encuentro.

Según la planificación del Gobierno chino para desarrollar el fútbol dentro de sus fronteras, 55 futbolistas de la Superliga China menores de 25 años fueron seleccionados para entrenador con el ejército nacional, más específicamente a cargo de la unidad de fuerza especial Tai'an 71770.

Allí, en la región de Shandong, los jugadores fueron sometidos a exámenes físicos y pruebas mentales, sin la posibilidad de renunciar, exponiéndose a una sanción mínima de ser desafectados de la Superliga China inmediatamente.

Cada uno de los jugadores será baja para sus respectivos equipos hasta el final de la temporada mientras cumplen con el plan que aspira a capacitarlos de manera tal que puedan superar el nivel del resto de futbolistas desde lo físico y lo mental.

Varias críticas han surgido al respecto, no obstante, el Gobierno de Xi mantiene firme su estrategia por convertirse en una nueva potencia emergente en el mundo del deporte.

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