A un mes de cerrar el año y con la mayoría de objetivos puestos en el 2018, una seguidilla de reuniones entre funcionarios del Gobierno Nacional, Superliga y Asociación del Fútbol Argentino (AFA) esta semana han delatado involuntariamente las matices de un proyecto tan ambicioso como alentador con miras al segundo semestre del próximo año, en donde la principal intención es devolver al fútbol local el derecho de contar con público local y visitante.

Tal y como reconstruye La Nación este fin de semana, el fútbol argentino adherirá al sistema de licencias promovido por la FIFA y CONMEBOL desde hace un par de meses, en donde cada uno de sus 26 equipos de Primera División se verá impulsado a reforzar su infraestructura a fin de cumplir con las condiciones mínimas para albergar un partido de Superliga Argentina de Fútbol.

A través de un “sistema informatizado de control y gestión de venta de entradas y acceso al estadio” tanto hinchas locales como visitantes serán debidamente registrados con sus nombres y apellidos, previo a cada encuentro tal y como especifica el artículo 9 del reglamento, sin permitir bajo ninguna condición el ingreso a personas con restricción por asuntos legales pendientes.

De esta manera, la idea de implementar el sistema apunta a entrar en vigor a partir de agosto del 2018 a través de su debida señalización, sistemas de comunicación con la policía y las autoridades pertinentes, un grupo electrógeno y el correcto plan de evacuación que facilite la desconcentración total del público en no más de diez minutos.

Con relación al presente del campeonato y las medidas actuales el director de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos, Guillermo Madero explicó: “En la urgencia que había hasta ahora, el ministerio de Seguridad lanzó el programa Tribuna Segura: llevamos 200 prófugos capturados y 1000 personas con restricción de concurrencia. Eso fue en 2017. Ahora, vamos por el cambio estructural.”

Estos y otros requisitos son especificados en el Reglamento de Prevención de la Violencia en Espectáculos Deportivos y serán parte del proceso para obtener la Licencia Superliga, que tiene como objetivo principal el de garantizar la seguridad en los estadios y habilitar así la presencia de hinchas visitantes.

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