Además de la cobertura integral del encuentro y los nuevos beneficios en televisión que la Superliga ofreció a sus millones de usuarios con el Superclásico argentino este fin de semana, la previa del encuentro había sido anunciada como un partido de la Liga de Campeones de Europa por sus características de organización y logística.

Entre otras cosas una de las principales propuestas apuntaba a que ambos equipos salieran por el mismo arco instalado en la mitad de la cancha y enseguida se formaran de frente a ua de las tribunas tal y como se acostumbra a hacer en el fútbol europeo.

No obstante, el local saltó primero al campo de juego directamente desde una manga que conectaba el vestuario local, mientras que la visita lo hizo unos segundos más tarde pasando por el arco instalado allí por la organización y las respectivas marcas.

Ante la sorpresa de los aficionados y medios de comunicación, se supo una vez concluido el encuentro que no se trató sino de un malentendido entre ambos equipos y la ansiedad de River por saltar al campo de juego mientras el plantel Xeneize venía intencionalmente demorado en su vestuario.

Al final se trató de pasar por alto el detalle pero varios de los patrocinadores del certamen no ocultaron su disgusto para con la organización al respecto.

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