A diferencia de lo que varios pensaban, los elevados costos de realización junto a las 11 mil localidades menos que salieron a la venta para el partido de Argentina en La Bombonera en lugar de en el Monumental terminaron por dejar un millonario superávit a la AFA.

Tal y como describe en su último informe el Diario La Nación, los costos totales de cambiar de estadio y llevar a cabo la localía bajo todas las normativas que la FIFA exige, bordearon los 25 millones de pesos, mientras que los ingresos totales fueron de 65 millones.

La principal ventaja según cuentan pasó por el incremento exponencial en el valor de las entradas y la habilidad de la dirigencia al momento de cerrar negocios con las distintas contratistas: “La recaudación termina siendo más alta que en Núñez porque, pese a que salieron a la venta 11 mil entradas menos que en el Monumental, las plateas se vendieron muy bien. Eso hace que ganemos más en la Bombonera”, explicaron desde la AFA.

Y es que, entre seguridad, logística y gastos fijos el partido no superó por mucho a los que usualmente organiza Boca Juniors por partidos de alguna copa internacional pero sí sacaron una abismal diferencia en recaudación, paradójicamente en un estadio más pequeño que en el que usualmente hace de local.

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