A raíz de varias polémicas que envuelven la designación de Qatar como futura sede de la Copa del Mundo en 2022, el ministro de finanzas local, Ali Sherif Al Emadi, declaró a la agencia de noticias APF, que el Gobierno actualmente invierte una cifra cercana a los 500 millones de dólares por semana para llegar con todo lo necesario a la fecha programada.

Asimismo, afirmó que el ritmo de inversión se mantendrá e incluso podría aumentar conforme pase el tiempo por los próximos tres o cuatro año y además explicó que, “esto no quiere decir que sólo invirtamos en los estadios, estamos hablando de autopistas, vías de tren, puertos, aeropuertos, hospitales y muchas infraestructuras más”.

Cabe destacar que, pese a lo astronómico que puedan sonar las cifras, el Gobierno qatarí continúa con medidas de austeridad que le permitan alcanzar los grados de rentabilidad esperados a mediano plazo.