La Selección femenina de Estados Unidos demandó a su federación este viernes 8 de marzo, en el Día Internacional de la mujer ante un juzgado federal de Los Ángeles (California), acusando a sus dirigentes de “discriminación de género institucionalizada”.
Las jugadoras del combinado nacional demandaron a la Federación tras varios meses de lucha y poco diálogo entre las partes, en donde buscaban igualdad de condiciones con sus pares masculinos en cuanto a las condiciones de trabajo.
En total, 28 integrantes del plantel extendieron la acusación a cualquier jugadora que forme o haya formado parte de la alineación femenina desde el cuatro de febrero de 2015, entre las cuales se ubican algunas figuras internacionales de la talla de: Carli Lloyd, Megan Rapinoe y Alex Morgan
Cabe destacar que la demanda no solamente aborda asuntos salariales, sino que también detalla situaciones en las cuales fueron tratadas de forma diferente en sus entrenamientos, traslados, hospedaje y atención médica.
“Cada una de nosotras está extremadamente orgullosa de vestir la equipación de Estados Unidos y nos tomamos seriamente la responsabilidad que eso conlleva”, manifestó Morgan en dialogo con el Wall Street Journal. "Creemos que la lucha por la igualdad de género en el deporte es parte de esa responsabilidad", concluyó.
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