Tras derrotar a su similar de Yokohama Marinos por 2 a 1 esta semana, el Cerezo Osaka se quedó con la Copa Emperador y se clasificó así a la Supercopa de Japón y Copa Suruga Bank frente a Independiente de Avellaneda con fecha aún por confirmar.
Siendo el primer equipo campeón del 2018, el ex club de Diego Forlán supo sacar a relucir su jerarquía local para imponerse durante los 90 minutos de juego y encarar también la J-League y AFC Champions de la mejor manera.
Cabe recordar que el certamen sudamericano japonés lleva una década de ediciones en donde para sorpresa de muchos la supremacía continúa del lado de los locales. Independiente ya jugó una versión de la competencia en el 2011 y la perdió frente al Jubilo Iwata, mientras que del lado de otros clubes argentinos tan solo River y Arsenal pudieron ganarla.