En el marco de la primera fecha del Grupo A de la Copa del Mundo, Uruguay derrotó a Egipto por 1 a 0, gracias a un agónico gol de José María Giménez al conectar de cabeza un centro de Carlos Sánchez desde el costado derecho.

El partido tuvo lugar en el estadio de Ekaterimburgo, que pese a tener el atractivo de Luis Suárez, Diego Godín, Edinson Cavani y Mohamed Salah dejó expuestos varios puestos vacíos apreciados tanto desde la televisión como desde el estadio.

Con sorpresa y admiración por el hecho, la FIFA comunicó a través de un portavoz a una agencia de noticias que se investigará el motivo, puesto que más del 90% de los boletos estaban vendidos.

“Podemos confirmar que se han asignado 32.278 boletos para el partido entre Egipto y Uruguay en Ekaterimburgo. La capacidad del estadio es de 33.061”, asegura un cable de noticias a lo que enseguida añade: “El hecho de que la asistencia real no refleje la cantidad de boletos asignados puede deberse a diferentes factores, que la FIFA está investigando actualmente”.

El máximo organismo rector del fútbol mundial ha repartido más de 2,5 millones de entradas para la cita mundialista, entre las cuales se destaca el 46% otorgado a ciudadanos rusos y unos 90 mil tickets para espectadores estadounidenses.

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