Tras el escándalo producido en México por una huelga de árbitros que reclama más respeto, se reveló que Decio De María, presidente de la Federación Mexicana de Fútbol habría solicitado contratar árbitros extranjeros con el objetivo de evitar pérdidas económicas que superan los 5,7 millones de dólares.

Y es que, producto de desmedidas y reiteradas agresiones físicas y verbales a los colegiados en todo el país habrían decantado en la protesta que exige un mayor nivel de respeto por parte de los jugadores, directores técnicos y hasta dirigentes hacia los árbitros.

Producto de la huelga, se supo que tanto De María como Enrique Bonilla (presidente de La Liga MX), habrían solicitado a la CONCACAF y CONMEBOL árbitros provisionales hasta limar asperezas con la Asociación de Árbitros local.

No obstante, más allá de la decisión que se tomó desde ambos organismos, se supo que árbitros del resto del continente ratificaron su solidaridad hacia sus colegas negándose a dirigir en tierras mexicanas.

A continuación un estimativo de pérdidas económicas elaborado por una cadena internacional tras la suspensión de la fecha.