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La (triste) historia sin fin

La (triste) historia sin fin
Martes 26 de Mayo de 2015
Trato de parar la pelota. Trato de parar desde la frialdad que cada día que pasa debería darme, para analizar todo lo que está ocurriendo en el fútbol argentino y, honestamente, me cuesta.

No lo puedo creer. O no lo quiero creer.

Es increíble ver como todos, absolutamente todos, los protagonistas del escándalo de la Bombonera, aquella “maldita” noche del 14 de mayo, pasean por los canales de televisión, tratando de explicar lo inexplicable, tratando de dar respuestas vacías, sin sentido, y como a la vez, se contradicen cada día más.

Por otro lado, están los que buscan sacar su rédito político y congraciarse con la gente, con el electorado, con el televidente, con quien sea.

En definitiva, de eso se trata. De hablar y hablar. Y de paso, NO encontrar soluciones.

En este triste incidente, quedó de manifiesto, la falta de comunicación. La falta de departamentos profesionales de comunicación. De la falta de PROFESIONALES de la comunicación, que al menos orienten de manera acertada y certera a los protagonistas de esta historia.

El presidente de Boca, el Dr. Angelici, ha quedado expuesto de una manera triste y lamentable, paseando por todos los canales de televisión, diciendo un día una cosa, otro día otra, y mañana no sabremos qué dirá.

Lo cierto, es que es junto al club el más perjudicado de todos. Los hechos violentos, la sanción, la eliminación de la Copa, etcétera, seguramente le significarán problemas serios a la hora de buscar su reelección en el club.

¿Eso es lo que verdaderamente le importa? ¿El terreno que perdió en su eventual búsqueda de la reelección? O encontrar a los verdaderos culpables.

Boca Juniors, según, un estimación hecha por www.marketingregistrado.com dejará de percibir la posibilidad de sumar entre 15 y 20 millones de dólares al no poder avanzar a instancias decisivas de la Copa, en concepto de venta de entradas, premios de CONMEBOL, valorización de su plantel y eventuales ventas de sus jugadores, partidos amistosos internacionales.

Es mucho dinero. Y Boca lo necesita. Como también necesita esclarecer este hecho ante la sociedad, lo que demostraría seriedad y verdadero interés institucional, dejando de lado las internas políticas, y poniendo de manifiesto una madurez necesaria para dar un paso adelante.

Boca falló en la comunicación. River Plate, también.

No se trata de hacer un comunicado de prensa con el membrete del club (unos cuantos días después de los incidentes). Se trata de aparecer, de mostrarse públicamente. De que haya una voz oficial respecto a lo acontecido, y de darle a los periodistas, todos los elementos necesarios para poder reunir datos e información, para poder escribir o contar todo lo ocurrido.

Pero River Plate, no lo hizo. Y no solamente no lo hizo, sino que en silencio, jugó su “carta” ante la CONMEBOL para ganar el partido y avanzar a la siguiente fase.

¿Esto es fútbol? NO. Esto es un bochorno. De grandes medidas. Que el tiempo no debe hacernos olvidar, y que los periodistas debemos remarcar. Porque no debemos dejar que nos engañen ni tampoco nos mientan.

Quedó clara la falencia comunicativa de ambos clubes en este caso. Quedó claro también, que había mucho más que los 3 puntos en juego en este partido, y quedo claro, que los intereses afuera de la cancha, para muchos, dependen de lo que ocurra adentro.

De AFA, me ocuparé en el próximo capitulo. Hoy, anárquica, sin liderazgo, sin conducción, a la deriva.

También, presa, de los intereses políticos del momento, y con dirigentes incapaces de tomar decisiones superadoras que puedan marcar en inicio del cambio en el fútbol argentino.

Mientras tanto. El “panadero” está y estará libre.

Continuará…