Fiel a nuestro compromiso con el tenis fuimos a visitar a Armando Cervone, Presidente de la Asociación Argentina de Tenis, a días de que el equipo de la Copa Davis se juegue la permanencia en el Grupo Mundial ante Kazajistán. Además de lo deportivo nos enfocamos en la gestión, la administración y el proceso de cómo se forma un tenista profesional, el futuro del deporte en el país, entre otras cosas:

“Nosotros tenemos un Consejo Directivo compuesto por 15 miembros más cuatro suplentes, una Comisión Fiscalizadora y desde hace unos años con autonomía, un Tribunal de Ética y Disciplina, no hay ninguna duda de que el tenis es hoy en día un deporte en donde el profesionalismo está a flor de piel, pero al mismo tiempo nos toca dirigir una entidad en la que nos toca marcar las líneas y poder distribuirlo hacia los clubes y Asociaciones”, comenta Armando en el inicio de la charla tras ser consultado acerca de la estructura del tenis local.

En la misma línea, Cervone reconoce que hoy la AAT es: “una entidad que a nivel deportivo es de primer mundo, nuestros jugadores tienen reconocimiento internacional y somo el país con el mayor número de años consecutivos en el Grupo Mundial de Copa Davis después de España y Francia. No obstante, a nivel económico somos una entidad de cuarto mundo, realmente es muy difícil sostener una actividad profesional con recursos escasos”.

“Siempre se preguntan cuál es el secreto del éxito del tenis argentino”, añade también al recordar que “este año vamos a tener el mayor número de jugadores junior en torneos de Grand Slam, al que se ingresa por ranking”.

Más adelante, el presidente nos cuenta acerca de los proyectos en los cuales se trabaja en la actualidad y cuáles han sido las expectativas, a esta altura cumplidas: “Siendo un deporte individual el tenis, el jugador está acostumbrado a manejarse con un entrenador y agente comercial privado, ante lo cual hemos venido trabajando con buenos resultados en que el jugador se sienta parte de todo un proceso en donde su presencia no solo lo favorezca individualmente sino al desarrollo del tenis de la Asociación que lo sigue”.

Por último, Cervone no deja de lado a los patrocinadores e indica que: “Tenemos que buscar la forma de que los grandes referentes del deporte nos ayuden a conseguir nuevos patrocinadores. Hoy trabajamos con Omint, San Cristóbal Seguros, Motorolla, Topper y varios socios locales que contribuyen con este proceso.”

Si bien, la consecución de la Copa Davis representó un hito histórico para el tenis argentino, el proceso interno e integral continúa con su desarrollo diario en el que convergen tanto el apoyo comercial como el protagonismo sabio de sus agentes a fin de hacer del deporte blanco uno de los pilares -en cuanto a actividad física e refiere- dE Argentina.